Justo antes del primer cafe



Justo antes del primer café, al llegar a clase de Derechos Humanos, con una profesora que es una fiel defensora de la equidad de genero y que en todos los ámbitos ha defendido teorías y posturas ; me pide que contribuya en la redacción de un Pacto por la ecología mental para promover la igualdad entre géneros y la autonomía de la mujer, se podrán imaginar las vueltas que esto da en mi cabeza.

Siempre me consideré feminista, pero qué va, lo he sido de dientes para afuera, porque alguien que cree verdaderamente en la equidad de géneros, es una persona que primero se quiere así misma; tremenda vergüenza tengo ahora con las mujeres que me han tenido que escuchar los discursos, sabiendo que he sido una presa fácil del vocablo patriarcal y de las redes de un machista; porque sí! son redes y bien articuladas, te desarman, sin gritos como los de los comerciales, sin puños como en las novelas, te desarman con un discurso bastante romántico, con altas dosis de delirio de persecución, una inseguridad del tamaño del universo y unas ganas tremendas de endosar las culpas en los demás, que sólo intentan abrirte los ojos.

Y ojo, nada más peligroso para la meta última de un machista, que su pareja tenga amistades que le abran los ojos, este es el primer frente al que ataca, los calificativos van desde los más hirientes hasta los más despectivos, busca eliminar los círculos de amistad y familiares, haciéndolos ver como los enemigos de la relación, como si fueran los culpables de sus inseguridades, o los causantes de los comportamientos "que no aprueba" y es que a medida que pasa el tiempo , esos comportamientos son casi todos, desde la manera de hablar, de vestir, lo que publicas en redes sociales, como si uno estuviera en una relación para ser "evaluado" y el amor suministrado en la dosis equitativa al nivel de cumplimiento de estas expectativas...como si la vida no fuera lo suficientemente dura, el amor en vez de ser tú refugio, se convierte en el campo de batalla donde de entrada, llevas la guerra perdida,.

Eso es lo que heredamos entonces? la cultura de que si no duele no es amor; que si no es difícil, duro, no es amor...que si no estas perdonando cachos, no es amor; que si no agachas la cabeza,no es amor; que si no te anulas, no es amor!!!

Debemos entonces ser zombies en nombre de la clase de amor enfermo que la tradición patriarcal nos ha enseñado y a través de diversos mecanismos , de los favoritos la culpa, la vergüenza y el miedo, hasta el placer sexual se nos ha negado, porque el inconforme en la cama es el hombre, a las mujeres que ni se nos ocurra decir que no estamos satisfechas; o que jamás usemos la bien conocida frase de que "es que necesitamos variedad" , porque en los hombres está bien , pero en nosotras las mujeres es un pecado, es un delito, porque hasta las excusas son cosa de hombres.

No somos seres divinos, el machismo nos divinizó para ellos mismos, a su utilidad y conveniencia, nos hicieron zombies en nombre del amor.

Como ven, es difícil, siquiera escribir sobre igualdad sin viciar los textos de machismo, porque culturalmente estamos predispuestas a entender el mundo desde la perspectiva de los hombres y a nosotras mismas a través de los ojos del patriarcado.

seguiré haciendo borradores, en mi versión virtual de hablar sola, de hacer monólogos que ojalá sirvan de algo o le sirvan a alguien.

Justo antes del primer café, voy por el segundo y aún no sé que escribir

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