A TODOS, DE ALGUNA MANERA SI


Los efectos emocionales y psicológicos de este encierro a causa de la pandemia del COVID-19 están dejando una larga estela de personas y relaciones con grietas, algunas totalmente rotas.
A todos, de alguna manera si nos ha afectado, no en la misma medida, no en las mismas áreas, pero no hay nadie que se escape de alguno de sus efectos.
Las relaciones de familia y de pareja están afrontando duras pruebas, la convivencia ininterrumpida, los espacios reducidos, la no participación de alguno de los miembros en las labores de cuidado, cambios o perdidas en las fuentes de ingreso, han hecho de las suyas al interior de los hogares y con las emociones.

Sin dejar de mencionar los altos índices de violencia doméstica, violaciones conyugales, abusos sexuales a menores, aumento de la producción y consumo de pornografía infantil y feminicidios, demostrándonos una vez más (y violencia sería no reconocerlo), que los menores y las mujeres somos población con vulnerabilidad extrema.

Los perpetradores de estas acciones no lo son por causa de la pandemia, a la que no se le debe considerar como un pretexto como los medios de comunicación intentan vender en sus titulares, la pandemia no crea victimarios, ellos lo son en cualquier tiempo, porque entre otras cosas, este virus no contagia la maldad.

Pero eso es tema para otro escrito, este va dedicado a las afectaciones emocionales en los individuos, las relaciones de pareja y los niños, que, si has llegado hasta aquí, es porque reconoces que no son pocas.

INDIVIDUAL

Que si hay que reinventarse, que si hay que transformarse, que si hay que mutar, que si hay que aprender 8 idiomas nuevos, escribir un libro, encontrar un pasatiempo, hacer ejercicio, hornear pasteles y galletas, emprender, ser resiliente, despersonalizarse…y no sé cuántas cosas más. Exigencias que aturden a cualquiera, que convierten una situación nada ideal como lo es una pandemia, en otra carrera de egos y de quién logra tener más cosas para mostrar.

Hay quienes llevan toda su vida tratando de saber quiénes son y no lo sabían antes de la pandemia y les dicen que tienen que ser otra persona.

Otros que apenas estaban encontrando su lugar en el mundo; los que estaban a punto de realizar el viaje soñado, de comenzar estudios, de casarse, de separarse, porque no todos tenemos las mismas metas, posibilidades y planes, cosa que a la pandemia poco le importó, a todos nos agarró desprevenidos y a todos nos ha cambiado las reglas del juego.

Cada uno con su tipo de vulnerabilidad está batallando con sus demonios personales, tratando de salir lo menos rasguñado posible.

Las fortalezas han tambaleado para algunos, han surgido nuevas para otros, y hay a quienes se les derrumbaron.
Nos llenan la cabeza de que las crisis deberían sacar lo mejor de cada uno, pues ahora tenemos el tiempo por el que siempre pedíamos; pero es que no todos tenemos las mismas herramientas emocionales, soporte económico y apoyo para que así sea.

Si has logrado cosas nuevas ¡excelente!  que sean motivo de felicidad, realización personal y traigan prosperidad a tu vida.

Si no, no es razón para darse con el látigo de las expectativas ajenas, a su manera cada uno está escalando su propio Everest, quizá tu triunfo es mantenerte cuerdo y eso es igualmente valido e importante.

PAREJAS

El aislamiento obligatorio (porque después de tantos meses, sería ridículo seguirlo llamando cuarenta) no es malo para el amor, es retador para las dinámicas de las relaciones de pareja.

Y es que pasar todo el día, todos los días, en el mismo espacio, sin posibilidad de cambiar de ambiente, de tener otro tipo de interacción social, de enfrentar cambios bruscos, puede convertirse en un verdadero desafío a la paciencia, que depende de cómo sea manejado, afectará de forma positiva o negativa la vida en relación.

Este tiempo ha obligado a muchas parejas a conocerse de nuevo, a repensar en que sustentan su relación, unas parejas han optado por darse la mano y sortear las adversidades, otras se han declarado la guerra y convirtieron la casa en un cuartel, si es que antes de todo esto, ya no lo era.

Las relaciones de pareja son retadoras, porque aquello que no hemos resuelto en nosotros mismos, tiende a proyectarse en el otro. A veces no es que tu pareja no te da lo que necesitas, es que no es adivino para leerte el pensamiento y hay cosas que podría estar dándote a manos llenas y no sabrías reconocerlo porque eres un barril sin fondo.
En esto de las relaciones hay de todo, porque todos somos diferentes, lo que para mí es la pareja ideal, para ti podría resultar la más aburrida del mundo.

Lo que si no entra a debate son las relaciones toxicas, abusivas y violentas, esas no deberían tener carácter aspiracional. Las agresiones son algo que con o sin pandemia, no tienen justificación, por eso es que si su relación es toxica, abusiva o violenta, lo mejor es salir de ahí, esa dinámica está viciada y es un peligro para su integridad física, para su salud mental y estabilidad emocional.

Ahora bien, todos hemos sido desafiados en nuestras relaciones de pareja durante el confinamiento, cada pareja tiene su historia, luchas, dificultades distintas y meterlas en un mismo saco es impensable.

Por otro lado, las parejas se componen de individuos, que tienen una construcción y manejo de emociones y situaciones diverso, hechos que lógicamente aportan para bien o para mal en la dinámica de la relación y las maneras en que estas pueden pasar de retos superados con éxito a retos convertidos en desastres.

Creo que ya más de uno, haciendo un balance de su relación, cayó en cuenta de que una buena pareja, es fundamental, que el amor sin respeto no es resistente a las adversidades y que la inteligencia emocional propia y del otro con quien se establece un vínculo amoroso, asegura una buena dinámica.

Propender por relaciones sanas, con personas emocionalmente estructuradas y comprometidas es una gran lección que nos deja esta pandemia.

NIÑOS

Padres y cuidadores padeciendo “clases virtuales” de los menores, pero más que ellos, lo están padeciendo los niños, a los que les ha tocado adaptarse a un sistema totalmente nuevo, mientras lidian con estar en casa todo el día, no tener contacto con sus amistades, espacios de juego, alejados de abuelos y otros seres queridos que les representan estabilidad y les refuerzan el sentido de pertenencia a su clan familiar,  aun así, los profesores se han encargado de enviar actividades en exceso y seamos honestos, varias de estas bastante innecesarias y como todo aquello salido de la imaginación de alguien que quiere justificar notas, más que generar procesos de aprendizaje exitosos, son frustrantes, tediosas y requieren demasiadas horas o materiales.

La realidad golpea a unos niños con mayor dureza que a otros, hay quienes no solo deben lidiar con lo anterior, sino que deben soportar entornos violentos, agresiones verbales y físicas, incapacidad de los padres o cuidadores de ser una ayuda en las actividades escolares y soporte en las dificultades emocionales.

Los niños, son niños, están llenos de energía y no tienen porqué comportarse como adultos, ¡no lo son!, ellos que apenas estaban formándose una idea del mundo y aprendiendo a moverse en él, sin previo aviso, vieron todas sus estructuras y sistemas cambiar.
Están haciendo su mejor esfuerzo todos, es más llevadero para los que tienen herramientas emocionales para hacerlo; los que no, están pasando aprietos mucho mayores que se manifiestan en pataletas, frustración mal manejada, que, en muchos casos, es una labor titánica para los padres controlar.

Ellos no estaban acostumbrados a pasar tanto tiempo con sus padres, ni sus padres con ellos, para todos, es un cambio de dinámica.

Madres exhaustas, que trabajan al tiempo que intentan balancear las obligaciones que se le triplicaron, mientras a su vez están tratando de no caerse a pedazos.

Padres que nunca fueron colaboradores de las tareas domésticas y de cuidado, tampoco lo han sido en medio de una pandemia, porque en su idea de mundo, ni, aun así, le corresponde encargarse… de absolutamente nada que sea ajeno a él.

Los padres que han fortalecido su rol de padres comprometidos en procesos colaborativos, que procuran entornos respetuosos, que acompañan a sus hijos (con o sin relación de pareja), han tenido como resultado niños más disciplinados, con mejor desempeño académico y han mostrado una fortalecida inteligencia emocional, están atravesando este tiempo de mejor manera, mientras desarrollan aspectos fundamentales y valiosos que les van a servir a lo largo de la vida.

Pero el tedio puede llegar, el fastidio, las ganas de jugar, ya los hemos visto extrañar el colegio, cualquier vestigio de normalidad para ellos es un alivio al encierro.

Así que piense antes de traer hijos al mundo, eso va más allá de cumplir con el requisito social de la descendencia y tener la plata para alimentarlos, son tareas compartidas (con o sin relación de pareja), es una responsabilidad para toda la vida; si va a traer hijos para hacerles padecer el infierno en la tierra, mejor no los traiga, el mundo se lo va a agradecer. Mejor ser un adulto responsable y consiente de sus capacidades que un padre o madre de hijos violentados y traumados. No hay pandemia más nefasta que la de adultos incompetentes, criando una niñez rota.

Cada situación, merece el reconocimiento del esfuerzo que se hace, lo merece cada persona que está haciendo lo mejor que puede con lo que sabe y con lo que tiene, hay luchas más intensas y situaciones penosas que este confinamiento ha recrudecido.
Es tiempo de ser empáticos, solidarios y mejores seres humanos, PORQUE A TODOS, DE ALGUNA MANERA SI.















LOS ANILLOS EN LAS RELACIONES DE PAREJA




Cada pareja desarrolla sus propias dinámicas, pues a cada quien le resultan ciertas cosas que a otras no, pretender esquematizar las relaciones de pareja, es bastante absurdo y eso aplica para todas las dimensiones que la componen.
Todos somos diferentes y nos relacionamos de maneras muy diversas, así como nuestra manera de demostrar afecto y las tradiciones que deseamos perpetuar son un reflejo de ello.
En una ocasión descubrí una tradición que me pareció muy significativa, más porque es el reflejo de lo que es hacer un compromiso sobre bases sólidas y la intención de hacer eterno eso que te hace feliz. Tradición que con ustedes voy a compartir.
En cuanto a los anillos que se entregan en cada etapa de una relación hay varias versiones, casi todas están de acuerdo en que los más comunes son:

                          1.    El anillo de promesa
2.    El anillo de compromiso
3.    El anillo de matrimonio
4.    El anillo de la eternidad
5.    Las “churumbelas”

Entre un largo etcétera, que incluye hasta la renovación del anillo de compromiso a los 15 años de matrimonio y nuevas argollas matrimoniales a los 25 años de la unión, pero como en todo, cada pareja escoge lo que desea integrar a su dinámica y lo que está en sus posibilidades; porque si estos objetos se van a convertir en motivos de reproche, discusión o deudas, ya perdieron en si todo su significado.

1.    El anillo de promesa

Es un anillo que se da durante el noviazgo, y que indica que la relación es fuerte y sólida, que podría convertirse en un compromiso más adelante.

2.    El anillo de compromiso

Que no necesita mucho contexto, es el que le entrega uno de los miembros de la pareja a otra, con la cual le propone matrimonio, es decir, le da a entender a la otra persona la intención de querer casarse.

3.    El anillo de matrimonio

También conocidos como “alianzas”, estos son una muestra material del compromiso que han sellado dos personas, en la boda, sea por el rito que sea; se mantienen en la tradición como símbolo de la unión. El material de estos varía de acuerdo a los gustos de cada pareja y su origen se remonta a unos 4800 años, proveniente de Egipto.


4.    El cintillo o anillo de la eternidad

A pesar de que el concepto de anillo de la eternidad inicialmente correspondía al diseño “anillo de eternidad” que es una argolla delgada incrustada con diamantes de principio a fin, con el tiempo ha sido objeto de muchas variaciones y hasta los diamantes han sido reemplazados por la piedra favorita de quien lo va a usar.
A pesar de esos cambios, su significado sigue siendo el mismo “amor eterno”, por eso recibe también el nombre del “anillo de la eternidad”, el diseño de esta argolla ha sufrido variaciones y más en la última década que se ha puesto de moda personalizar las joyas. 

Por ello el “half eternity” se ha convertido en una tendencia más cómoda y práctica, pues consta de piedras solo en la mitad superior del anillo. O por gusto y comodidad también puede ser un cintillo, que es una argolla delgada lisa, cuando los anillos de compromiso y matrimonio son grandes y no se quiere ser extravagante.
Esta pieza que suele ser más delgada que la argolla de matrimonio, se entrega como obsequio en el primer aniversario o durante el transcurso de ese primer año, pues de acuerdo a la creencia popularmente aceptada el primer año de matrimonio es un reto para la pareja, pues corresponde al acoplamiento de la vida en pareja y superar el reto de la convivencia.

Este anillo pasa a formar parte del juego de anillos de compromiso y matrimonio, usándose los 3 en el mismo dedo y es una manifestación material de la promesa de un amor eterno.
Pero como nada es camisa de fuerza, este anillo también es entregado con el nacimiento del primer hijo o en una ocasión considerada especial, aunque para mí estos serían “churumbelas”, no anillos de la eternidad.

Pero independientemente del diseño y del gusto de cada persona, lo que se mantiene es el romántico significado de esta pieza, que es amor eterno; ya ese amor que conoce más a fondo a la otra persona en su cotidianidad y ha confirmado que tomó la decisión correcta, que desea mantener ese compromiso de amor y lealtad. 

5.    Las churumbelas

Estas piezas suelen tener, a diferencia de las argollas, mucho detalle y garigoles. Aunque hay distintos tipos, las churumbelas más conocidas son engarzadas con varios diamantes pequeños, diseño que también ha sufrido modificaciones, se ha adaptado a los gustos personales y posibilidades económicas.
Estos anillos son entregados en ocasiones especiales, nacimientos de hijos, aniversarios (después del año), no tienen realmente reglas fijas, calendario o están limitadas a algunas ocasiones.

Las manifestaciones de amor deben ser en la medida de las posibilidades, pero si ustedes pueden y desean integrar las tradiciones de los anillos, son regalos maravillosos y duraderos. No porque el amor necesite de joyas para mantenerse, necesita acciones, compromiso, cumplimiento de obligaciones, pero si se pueden adicionar detalles como estos, no hay motivo para no hacerlo.

NO ME CORRESPONDE A MI, ALIMENTAR ESE VÍNCULO




Cada quien debe alimentar sus vínculos con sus seres queridos, eso no es tarea ni obligación de terceros, eso pareciera tener todo el sentido del mundo afirmarlo.

Luego sucede, que eres madre y te toca casi que obligatoriamente mantener el vínculo afectivo de tu criatura con el padre ausente y asumir el papel de guardián de los lazos afectivos que estos ni se molestan en tener.

Todo el mundo opina y te dice que es por el bien de los hijos, pero si es en nombre de ese bien ¿por qué no le dan esos mismos conejos al padre ausente, con el mismo tono de reproche?

Eso no pasa, porque a las madres se nos endilgan todas las responsabilidades y obligaciones en nombre de un supuesto bien de los hijos, pero esa misma gente, disculpa al padre ausente.

La supuesta ignorancia afectiva de los hombres no es excusa, para que estos no asuman su labor de padres y procuren el bienestar emocional de los hijos, con tiempo de calidad, con conversaciones, con llamadas y mensajes constantes. Pero estos bien que esperan un amor sin condiciones de los hijos. 

Si notan que hay un patrón con algunos hombres, que, siendo emocionalmente distantes, estando ausentes, aun así, creen que se les debe retribuir con amor incondicional.
Nadie debe amar por obligación a nadie, ni los hijos a los padres, ni siquiera los padres a los hijos. Los vínculos se deben construir y se deben alimentar, pero nos educaron en el amor obligado a la familia, a los padres sean estos buenos o malos, nos educaron para creer que en nombre del amor hay que soportar ausencias, indiferencias, maltrato y un largo etcétera, porque se supone que a la familia hay que amarla por sobre todas las cosas, idea nociva y perjudicial que a más de uno le ha costado tranquilidad. 

El amor no es algo que deba darse por obligación, ni debe mantenerse sin razones, debe ser sano, recíproco, respetuoso, cualquier clase de amor, no solo el amor romántico. 

No es labor de ninguna madre, hacer las del mico para que los hijos amen a un padre que no se comporta como tal y que no muestra intenciones de participar en la vida de su hijo.
Nos corresponde darles herramientas a nuestros hijos, para que entiendan que el comportamiento de su padre hacia ellos, no define lo valiosos que son como persona, porque esos hijos con padres ausentes, creen que hay algo malo con ellos, que por eso papá no los quiere, a esos hijos hay que repetirles y demostrarles que ellos merecen todo el amor del mundo.

Llegada cierta edad, ellos comprenderán que los padres ausentes lo son por diversos motivos, puede ser que sean personas con nula formación afectiva, personas que no saben relacionarse, pero que ellos como hijos no les deben amor, que nada de lo que hagan va a ser que los ame pero que no hay nada malo con ellos, que son maravillosos y que está bien, que no todas las personas alrededor suyo van a amarlo, pero que son importantes las personas que si los van a amar y los van a amar bien. Porque por encima del amor a secas, el amor que sabe amar. 
Que hay que amarse mucho, para que su autoestima no dependa de las apariciones fugaces de estos padres ausentes, y que no permitan vender su amor a cambio de regalos.

A todas las madres que hoy se sienten con la obligación de alimentar un vínculo que no existe, les digo que se liberen de cargas innecesarias, que esa energía que se utiliza en tratar de crear puentes entre sus hijos y padres ausentes, úsenla para blindar las emociones de sus hijos, intentar que sean capaces de no odiar, pero que también sean consientes que no necesitan un amor forzado.
Una lección de vida, que va a forjar en ellos la idea del amor sano y poder, generación tras generación ir terminando tradiciones dañinas alrededor de la idea de familia. 

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ACOSO SEXUAL LABORAL




El acoso sexual laboral es otra de las formas de violencia que las mujeres tenemos que enfrentar, porque, aunque se lea repetitivo en este blog, es una conducta que afecta en su mayoría a las mujeres y que a pesar de todo lo reprochable que es, no ha dejado de estar presente en los espacios de trabajo.

A una larga lista de desigualdades que las mujeres de todas partes debemos afrontar, se le suman las asociadas al mundo laboral, que no son distintas a las cotidianas, pues la raíz de todo se encuentra en la mentalidad de los perpetradores y la vulnerabilidad de las víctimas.
Es así como hombres y mujeres, una vez más están en una relación desigual y son estos primeros quienes convierten el espacio de trabajo, en un lugar inseguro.

Se supone que el trabajo dignifica y que es un derecho para hombres y mujeres en la misma proporción. Pero los derechos de las mujeres, esos que escritos en papel son una maravilla, en la realidad son solo palabras muy fáciles de ignorar.

Mientras los hombres sigan considerando a la mujer, un ser humano de segunda categoría, aquel miembro de la especie que está para atender sus necesidades, va a seguirse reproduciendo la idea de que las mujeres somos objeto de deseo del otro, se nos ve como algo y se nos trata muy por debajo de las expectativas.
Las empresas y en general los entornos laborales y de trabajo, están llenos de testosterona no controlada, esa que dicta que, si se comparte el espacio con una mujer, está debe ser la que sirva el tinto el tinto en las reuniones, es la persona a la que se le mira su físico y sobre la cual todos se sienten con derecho a opinar o a acosar.

Las mujeres no tenemos por qué soportar el suplicio de la falta de control de los impulsos de hombres que no tienen una correcta formación sexual, que ven en el escote de una compañera de trabajo una invitación sexual a su nombre. Ni somos las responsables de las ideas arcaicas que tradicionalmente las religiones nos impusieron, como las causantes de los deseos irrefrenables de los hombres.No somos la causa de la falta de educación y formación sexual masculina, pero si somos las victimas de ella. 

Por eso debemos alzar la voz cada vez más fuerte, por cada una que ha sido objeto de comentarios de índole sexual, por aquella a la que rozan o frotan sin su consentimiento; por aquella a la que han texteado insolencias; por aquella a la que siendo mejor que los demás, fue descrita como la que llegó a donde está por favores sexuales; por aquella que recibe correos electrónicos con insistentes invitaciones que ha rehusado mil veces; por aquella que ha sido objeto de las miradas libidinosas y las sonrisas macabras de un macho que considera que ella está ahí para satisfacer sus fantasías; por aquella que no va a la cafetería para no ser abrazada, ni tocada; por aquella que recibió fotos intimas de un jefe o compañero de trabajo sin ser pedidas; por aquella que ha dejado un trabajo por el que luchó porque no soportó el acoso por parte del jefe o algún compañero de trabajo; por aquella que sale a visitar a los clientes y estos le faltan el respeto agarrando sus cinturas o sus cuerpos sin permiso y siente que debe aguantarlo para no perder el trabajo.
Por todas y cada una de las mujeres que hemos tenido la sensación de ser las culpables de estas conductas.

  1. ¿QUE ES EL MOBBING O ACOSO LABORAL?
“Toda conducta que, realizada en el contexto de una relación de prestación de servicios profesionales, tiene por objeto o por efecto la creación de un ambiente intimidatorio, ofensivo o humillantes para una o varias personas, susceptibles de provocar daños a su integridad personal, ya en su vertiente física, psíquica o en la moral”[i]
Se entenderá por acoso laboral toda conducta persistente y demostrable, ejercida sobre un empleado, trabajador por parte de un empleador, un jefe o superior jerárquico inmediato o mediato, un compañero de trabajo o un subalterno, encaminada a infundir miedo, intimidación, terror y angustia, a causar perjuicio laboral, generar desmotivación en el trabajo, o inducir la renuncia del mismo.[ii]

  1. MODALIDADES GENERAL DE ACUERDO A LA LEY 1010 DE 2006
2.1Maltrato laboral. Todo acto de violencia contra la integridad física o moral, la libertad física o sexual y los bienes de quien se desempeñe como empleado o trabajador; toda expresión verbal injuriosa o ultrajante que lesione la integridad moral o los derechos a la intimidad y al buen nombre de quienes participen en una relación de trabajo de tipo laboral o todo comportamiento tendiente a menoscabar la autoestima y la dignidad de quien participe en una relación de trabajo de tipo laboral.

2.2 Persecución laboral
: toda conducta cuyas características de reiteración o evidente arbitrariedad permitan inferir el propósito de inducir la renuncia del empleado o trabajador, mediante la descalificación, la carga excesiva de trabajo y cambios permanentes de horario que puedan producir desmotivación laboral.

2.3. Discriminación laboral: todo trato diferenciado por razones de raza, género, origen familiar o nacional, credo religioso, preferencia política o situación social o que carezca de toda razonabilidad desde el punto de vista laboral.

2.4. Entorpecimiento laboral: toda acción tendiente a obstaculizar el cumplimiento de la labor o hacerla más gravosa o retardarla con perjuicio para el trabajador o empleado. Constituyen acciones de entorpecimiento laboral, entre otras, la privación, ocultación o inutilización de los insumos, documentos o instrumentos para la labor, la destrucción o pérdida de información, el ocultamiento de correspondencia o mensajes electrónicos.

2.5. Inequidad laboral: Asignación de funciones a menosprecio del trabajador.

2.6. Desprotección laboral: Toda conducta tendiente a poner en riesgo la integridad y la seguridad del trabajador mediante órdenes o asignación de funciones sin el cumplimiento de los requisitos mínimos de protección y seguridad para el trabajador.
[iii]

Sin embargo, está ley se quedó corta en algunas definiciones y dejó por fuera situaciones como el acoso laboral organizacional, así como lo poco efectivo del procedimiento para prevenir estas situaciones, sin mencionar las dificultades en las que se encuentra una persona víctima de estas conductas a nivel probatorio y la poca cultura de protección a las víctimas que en este escenario no es una excepción, pues quien denuncia, suele ser catalogado como persona problemática, “delicada” y termina siendo objeto de duras críticas.

  1. OTRAS MODALIDADES DE ACOSO LABORAL:
Hay modalidades de acoso que la realidad nos exige tener presentes estas son:
a.    El acoso laboral maternal

b.    El acoso sexual laboral

c.    El acoso a través de los medios electrónicos

d.    El acoso organizacional

4.    ¿QUÉ ES EL ACOSO SEXUAL?

“Comportamiento en función del sexo, de carácter desagradable y ofensivo para la persona que lo sufre. Para que se trate de acoso sexual es necesaria la confluencia de ambos aspectos negativos: no deseado y ofensivo”.[iv]

5. El ACOSO SEXUAL ES UN DELITO

Este delito, fue incluido en el código penal en el artículo 210 A,  como un delito mediante el artículo 29 de la ley 1257 de 2008[v]

Artículo 210 A. Acoso sexual. El que en beneficio suyo o de un tercero y valiéndose de su superioridad manifiesta o relaciones de autoridad o de poder, edad, sexo, posición laboral, social, familiar o económica, acose, persiga, hostigue o asedie física o verbalmente, con fines sexuales no consentidos, a otra persona, incurrirá en prisión de uno (1) a tres (3) años.[vi]

6.    CUANDO SE CONFIGURA EL ACOSO SEXUAL SEGÚN LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA.[vii]

a.    Un acto verbal o físico que implica “acciones, tocamientos, señas o conductas de naturaleza sexual y que no constituyen un delito más grave”
b.    Debe haber una relación de superioridad (asimetría entre la víctima y el agresor)
c.    Debe ser una conducta repetitiva, insistente, que genere mortificación en la víctima.
d.    conductas no consentidas que buscan un favor sexual en beneficio propio o de un tercero
e.    no se trata de un delito de resultado, en lo que al cometido eminentemente sexual respecta, puesto que no necesariamente se desea la relación sexual, si no que la conducta va orientada a hacer comentarios obscenos, insinuaciones, ligeros tocamientos.



7.    ACOSO SEXUAL LABORAL

La OIT define el acoso sexual como un comportamiento en función del sexo, de carácter desagradable y ofensivo para la persona que lo sufre. Para que se trate de acoso sexual es necesaria la confluencia de ambos aspectos negativos.

El acoso sexual puede presentarse de dos formas:

1) Quid Pro Quo, cuando se condiciona a la víctima con la consecución de un beneficio laboral - aumento de sueldo, promoción o incluso la permanencia en el empleo - para que acceda a comportamientos de connotación sexual, o;
2) ambiente laboral hostil en el que la conducta da lugar a situaciones de intimidación o humillación de la víctima.[viii]

Uno de los reclamos a los que se sienten con derecho los hombres es decir que “ahora todo es acoso, que antes a las mujeres se les podían decir piropos y ser galantes y que las mujeres eran felices con eso”, ante esa clase de comentarios uno debe respirar hondo, a veces es difícil creer que uno tenga de interlocutor a una persona que no es capaz de reconocer que la molestia que ahora expresan las mujeres no es nueva, lo que es nuevo es poder alzar la voz, con un poco más de certeza de ser escuchada y no ser tildada como culpable de las conductas inapropiadas en su contra. Y que eso que según él es galantería, quizá lo sería si existiera por la otra parte consentimiento, pero que, siendo capricho suyo, son acoso.

Las mujeres de antes, sentían una obligación de sometimiento al poder masculino y al existir desigualdades en estudios y puestos ocupados, se tomaba esta subordinación como una especie de permiso para acosar, no es que todo ahora sea acoso, siempre ha sido acoso.

Sin embargo, vencer los temores asociados a la denuncia es algo que aun cuesta mucho a varias mujeres.
Ser educadas en la culpa, ser criadas en la obediencia ciega a las figuras masculinas del hogar y la sociedad, juegan un papel en contra de nosotras, que en situaciones de vulneración de derechos por parte de un hombre hace que se lleguen a generar sentimientos encontrados.

El miedo a perder el trabajo y lo más común en ámbitos laborales, ser catalogada como “la zorra que se lo buscó”, “la bandida que lo propició”, entre otras, porque de alguna manera las mujeres cargamos el lastre histórico de ser las culpables de los deseos de los hombres y de las acciones que les siguen a estos deseos, cuando los únicos culpables son ellos mismos.

También es de suma importancia mencionar que debido a la poca importancia que se le da en las empresas a la regulación de estas conductas, las mujeres que denuncian son catalogadas como “empleadas problemáticas” “muy sensibles”, como si aguantar conductas de acoso sexual fuera una obligación y la que más aguante es la más fuerte.



8. ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DEL ACOSO SEXUAL LABORAL

·         Un comportamiento sexual o de connotación sexual
·         Indeseado por el sujeto afectado
·         Se desarrolla en el ámbito de organización y dirección del empresario.

Cada caso contiene variables distintas, puesto que el victimario y la victima son personas distintas y la evolución de los estudios sobre este delito, ha sido a mi parecer muy lenta y bastante permisiva con los hombres.

El acoso sexual laboral, tiene por objetivo hacer sentir a la víctima vulnerable, desprotegida, hacerla sentir que el lugar de trabajo no es un lugar seguro y ¿quién puede desempeñarse de la mejor manera, cuando se siente constantemente amenazada? Tocará empezar a hablar de las pérdidas económicas asociadas a esta conducta, quizá tocando algo que les duele (la plata) consideren no ser permisivos ni cómplices, puesto que si hay consecuencias económicas y de productividad en las empresas donde se presentan casos de acoso sexual. Ya que las consecuencias psicológicas y emocionales de la mujer víctima y su entorno, no parecen quitarles el sueño.

Las consecuencias varían de acuerdo a la víctima, pues no todas las personas tienen la misma capacidad para enfrentar situaciones de este tipo y las condiciones emocionales en las que se encuentre la persona tampoco son iguales.
Por ejemplo: las secuelas y consecuencias no van a ser las mismas entre una mujer que ha sido víctima de algún tipo de violencia de género que en una persona que no ha pasado por un episodio de estos.
Esto no quiere excusar ni minimizar el daño que la conducta del acosador tiene sobre ninguna de las dos, es tratar de concientizar que hay a quienes afecta más.
Una mujer que experimenta un duelo por la muerte de un ser querido y que tenga que enfrentar acoso laboral en su espacio de trabajo.
Una mujer que es víctima de violencia intrafamiliar y reciba mensajes, correos de un jefe o compañero de índole sexual, va a sufrir en mayor medida las consecuencias de estas conductas, que los hombres llaman de coqueteo o juegos.
No son lo uno, ni son lo otro.

La diferencia entre coqueteo y acoso es el consentimiento, un concepto que ha sido muy difícil de entender; tan difícil como sacarle de la cabeza a los hombres de que “cuando una mujer dice que no, quiere decir que sí” o “se está haciendo la difícil”, el nivel de egocentrismo no les da para concluir que, si a ti te gusta una mujer, ella no tiene que corresponderte. Ni tiene porque aceptar como si fuera un honor, conductas inapropiadas en su entorno laboral.


8.    MANIFIESTO CONTRA EL ACOSO SEXUAL LABORAL

Si como jefe, encargado del departamento de gestión humana, persona comprometida al cambio deseas consultar sobre herramientas que puedan ponerse en práctica en las empresas dejo el link en el cual podrás encontrar un MANIFIESTO EN CONTRA DEL ACOSO SEXUAL LABORAL







[i] Observatorio vasco sobre el acoso moral en el trabajo
[ii] Ley 1010 de 2006 Por medio de la cual se adoptan medidas para prevenir, corregir y sancionar el acoso laboral y otros hostigamientos en el marco de las relaciones de trabajo.
[iii] Ley 1010 de 2006 Por medio de la cual se adoptan medidas para prevenir, corregir y sancionar el acoso laboral y otros hostigamientos en el marco de las relaciones de trabajo.
[iv] Red Colombiana de periodistas con visión de género ¿QUÉ ES EL ACOSO SEXUAL? Recuperado de http://www.redperiodistasgenero.org/que-es-el-acoso-sexual/
[v] Ley 1257 de 2008 (diciembre 4) “por la cual se dictan normas de sensibilización, prevención y sanción de formas de violencia y discriminación contra las mujeres, se reforman los Códigos Penal, de Procedimiento Penal, la ley 294 de 1996 y se dictan otras disposiciones”. Congreso de Colombia. 2008
[vi] Código penal colombiano, articulo 210 A
[vii] CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, SALA DE CASACIÓN PENAL, M.P FERNANDO LEÓN BOLAÑOS PALACIOS
 SP107-2018 Radicado N° 49799. Aprobado Acta No. 38. Bogotá, D.C., 7 de febrero de 2018
[viii] Declaración relativa a los Principios y Derechos Fundamentales en el Trabajo. Acoso sexual en el lugar de trabajo. Oficina internacional del trabajo. https://www.ilo.org/wcmsp5/groups/public/---ed_norm/---declaration/documents/publication/wcms_decl_fs_115_es.pdf

El principito

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